En un mundo donde la ilusión del dinero fácil atrapa a miles de jóvenes, Kevin Fortuna, un chico de 19 años, se convierte en víctima de una trampa que no muchos logran sortear: la ludopatía. «Jugadas Perdidas» es una novela que pone el foco en los efectos devastadores de las apuestas y en cómo la adicción al juego puede destruir vidas enteras.
La caída en el pozo de las apuestas
Kevin no tenía intención de convertirse en un adicto. Todo empezó como un juego, una manera rápida de ganar dinero y sentir la adrenalina de la victoria. Sin embargo, lo que comenzó con pequeñas apuestas en línea y visitas a casas de juego, pronto se convirtió en una espiral sin control. Perdió su dinero, su trabajo y lo más importante: la confianza de su familia y amigos. ![]()
Las casas de apuestas y las plataformas digitales saben cómo enganchar a sus usuarios, ofreciendo bonos, promesas de éxito y la sensación de que, con la apuesta correcta, todo se puede solucionar. Pero la realidad es muy distinta: en el juego, la banca siempre gana.
La verdad detrás del negocio del juego
Cuando Kevin toca fondo, descubre que no es solo cuestión de suerte: detrás de las apuestas hay un sistema diseñado para que el jugador siempre pierda. Manipulación, algoritmos creados para generar adicción y una industria que mueve miles de millones a costa de la desesperación ajena.
Es aquí donde entra en escena Alejandro, un policía con un pasado marcado por la ludopatía en su propia familia. Juntos, Kevin y Alejandro deciden enfrentarse a la red de apuestas ilegales que los tiene atrapados. Pero denunciar este sistema no es tarea fácil. El juego está amañado y quienes lo manejan no permitirán que un simple jugador cambie las reglas.
Una historia de lucha y redención
«Jugadas Perdidas» no es solo una historia de adicción, sino también de resistencia y superación. Kevin deberá tomar la decisión más difícil de su vida: hundirse por completo o hacer su última jugada, una que podría costarle la vida.
A través de una narración impactante, llena de giros inesperados y una dosis de suspenso, esta novela expone una realidad que afecta a miles de jóvenes en todo el mundo. Las apuestas parecen una vía de escape, pero en realidad son una trampa de la que pocos logran salir.
¿Por qué leer «Jugadas Perdidas»?
🔹 Porque muestra la cara oculta de las apuestas y cómo afectan a la juventud.
🔹 Porque es una historia emocionante, con personajes profundos y situaciones que podrían ser reales.
🔹 Porque pone sobre la mesa un problema social que crece cada día más.
Si alguna vez has sentido la tentación de apostar o conoces a alguien que lo ha hecho, esta historia te abrirá los ojos. Kevin Fortuna es el reflejo de muchos jóvenes atrapados en un sistema diseñado para hacerlos perder. La pregunta es: ¿logrará ganar su última jugada?